La familia Kardashian siempre bota la casa por la ventana cada vez que celebran alguna fecha especial y, por supuesto, este día de Acción de Gracias no podría ser la excepción. De hecho, Kylie Jenner lo celebró con una sesión de fotos profesional.
¿La razón? Agradecer por el regalo más grande que recibió este año: su hija Stormi y su novio, el rapero Travis Scott.
La joven empresaria compartió las fotos en su cuenta de Instagram, en donde aparecen los tres en tonalidad de blanco y negro. La que más llamó la atención fue un retrato familiar que enfoca, principalmente, a la menor.
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Definitivamente, su nueva familia es un regalo para agradecer toda su vida.
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