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En 2017, la joven cantante y actriz Selena Gómez tuvo que someterse a un trasplante de riñón luego de sufrir complicaciones derivadas del lupus que padece.
En ese entonces se conoció que quien salvó la vida de la cantante sirviendo como donante fue una de sus mejores amigas, información que se supo mucho después, ya que la famosa siempre quiso tener en reserva varios detalles relacionados con su estado de salud.
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Tres años después, Selena muestra por primera vez la cicatriz en la entrepierna que dejó su intervención, mientras aparece posando en un traje de baño azul.
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Con un emotivo mensaje, Selena se sinceró con sus fans y reveló que no fue fácil asimilar la marca.
“Cuando recibí mi trasplante de riñón, recuerdo que al principio fue muy difícil mostrar mi cicatriz. No quería que apareciera en fotos, así que use cosas que la cubrían (…)”, dice parte del mensaje.
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Asimismo, indicó que ahora se ha armado de valor sintiéndose orgullosa de sí misma, de su cuerpo y de la marca que dejó una difícil situación que logró superar.
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“Ahora más que nunca, confío en quien soy y por lo que pase y estoy orgullosa de eso (…)”, continúo la joven.
Fue tanto el furor que causó la publicación de la cantante, que, en menos de cuatro horas su instantánea completó más de ocho millones de reacciones.
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