El olvido que seremos se convirtió en la primera película colombiana que recibe la distinción a mejor película iberoamericana en los Premios Goya .
Una historia real con grandes actuaciones y una excelente producción que se empezó a trabajar hace más de dos años. Dago García contó cómo fue la preproducción de la cinta y las dificultades que se fueron presentando en el camino como por ejemplo, el reto de pasar un relato literario a la pantalla grande sin perder el espíritu de la obra.
El rodaje duró 56 semanas e incluyó actores nacionales e internacionales. En cuanto a la posproducción, se realizó en 7 meses, para un total de dos años en todo el proceso.
Héctor Abad Faciolince explica la importancia de hablar de un personaje tan importante para el país como lo fue su padre y dice que prefiere la película sobre el libro que él mismo escribió.
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