El cantante de rock y música protesta Piero Antonio Franco de Benedictis, conocido como Piero
, nació en Italia pero se radicó en Argentina desde su infancia, y desde aquel país se dio a conocer en la década de los 70 como un agente de cambio social que a través de sus letras reflejaba el sentir de toda Latinoamérica.
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A sus 72 años, Piero llega a la 30 edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá para contar los episodios más representativos de su vida, tanto personal como profesional, que lo llevaron a ser hoy considerado como uno de los iconos más importantes del rock en español y uno de los más queridos por los colombianos.
En una charla con la periodista Maureen Maya, autora de ‘Piero, mi querido Piero’ que contó con el prólogo del editor general de El Espectador, Jorge Cardona, el cantautor hizo un repaso por su carrera artística, su guitarra, su familia y aquellos episodios que en la década de los 70 opacaron su nombre en Colombia, pero que luego lo llevaron a otorgarle la nacionalidad y hace un año ser nombrado embajador de paz.
En sus comienzos, Piero escribía sobre la cotidianidad, el amor y los temas típicos que brotan del ser y la mente de un artista que está en el proceso de autodescubrirse y encontrar su propio estilo. Pero en algún punto, según cuenta Maya, “él sentía que no era suficiente su trabajo, sentía que debía hacer algo que conectara más a la gente”. Así que surgió un artista que se reveló ante el gobierno argentino por medio de letras que se convirtieron en himno para los sectores populares de aquella sociedad.
Temas como ‘Si vos te vas’, ‘Juan Boliche’, ‘Pedro Nadie’, ‘Que se vayan ellos’ o ‘Los americanos’, marcaron a una generación que buscaba la democracia y el respeto por los derechos humanos. Pero ese camino le traería consecuencias a Piero en su primera visita a Colombia, cuando recuerda cómo fue perseguido por el DAS y expulsado del país.
“Arranca en Bogotá, vine a la Universidad de Los Andes, fueron 7.500 personas y eso fue realmente una cosa muy increíble porque había seis estudiantes juntos que tiraban un gas lacrimógeno por si la duda. Fue un concierto hermosísimo, no pasó nada, nos desahogamos, hasta que el otro día viene lo de la Nacional. El DAS se mete en el medio y les prohíben ir (a los estudiantes)”.
En esta visita a la Filbo 2017
, Piero también habló de uno de sus más grandes éxitos en el mundo hispano, un tema que ha trascendido de generación en generación y conmueve hasta al más pequeño: ‘Mi Viejo’.
“Estaba componiendo con José Tcherkaski. Había que hacer una canción al padre porque a la madre se le hizo montones, el padre es muy especial. Empezamos a hablar del padre como redescubriéndolo. Entonces tuvimos como 10 días sin agarrar yo la guitarra y él sin escribir nada, sólo hablando del padre como súper hombre, el súper héroe más grande de todos”, contó con mucha emoción.
Cuando estuvo finalizada aquella composición, que no iba dirigida específicamente a sus padres, Piero tuvo un “arranque de locura” por ir a mostrársela a su papá, lo que se convirtió en una bella anécdota que recordará por siempre.
“Cuando levantó la mirada, el tipo estaba llorando, eso me hace llorar a mí, peor que un parto. Y entonces termina la canción, silencio, más que silencio lloradas y bueno “ahora que diga lo que le parezca”. El tipo no decía nada, seguía llorando y caminando, se toma los anteojos, empieza a limpiarlos, se acerca, se sienta en frente mío, se pone los anteojos, me mira fijo y me dice: “no hay quien camina lento, la puta que te pareó"”, relató sacándole carcajadas al público.
Piero interpretó temas con guitarra en mano, como ‘Llegando, llegaste’, no podía faltar ‘Mi viejo’, que hizo aguarle el ojo a más de una persona, y cerró con ‘Si vos te vas’, dejando a sus seguidores totalmente cautivados.
Por: Natalia Rodríguez Fandiño
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