Como buena costeña, Daniella Álvarez es amante del sancocho, del buen pescado frito y del mote de queso. Por eso, en el Desafío The Box cuenta con una ‘paisana’ que es la encargada de consentirla en todos sus antojos culinarios.
Tal y como lo confesó en #DetrásDeCajas, Daniella tiene varios placeres culposos y todos tienen que ver con la comida, pues aunque quiera siempre mantenerse en forma, su debilidad son los dulces y las harinas.
Pese a que la bella anfitriona es consciente de que debería ser más estricta con la alimentación, ella misma desde su amputación ha dado una lección de siempre disfrutar y aprovechar cada momento que nos regale la vida, sin importar si viene acompañado de una harinita o un delicioso dulcecito.
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Desafío The Box
es la nueva versión del reality, donde hombres y mujeres de todas las regiones del país se unieron para poner a prueba sus habilidades físicas y mentales para ganar 800 millones de pesos. La competencia se vive en una ciudadela, construida en medio del maravilloso paisaje de Tobia, Cundinamarca, lejos de las metrópolis, del ruido y contando con todos los protocolos de bioseguridad.