Conoce a Rani Hong, una mujer con inspiradora historia que visita Colombia con importante misión

Luego de su última visita en 2014, Colombia recibe nuevamente a Rani Hong, una mujer americana de origen indio, empresaria social y sobreviviente del tráfico infantil; quien dedica su tiempo y energía a liderar un mayor entendimiento global acerca de la trata de personas y a hablar por aquellos que no tienen voz o están privados de su libertad, esclavizados, silenciados e imposibilitados de contar sus propias historias.En esta ocasión, Rani está en el país con el propósito de traer una iniciativa creada por ella misma que se llama Sello de la Libertad, el cual es una certificación para empresas que luchan contra la esclavitud humana comprometiéndose a mitigar el crimen financiero y la esclavitud moderna. El Sello de la Libertad simboliza a un sistema de mercado en el que el trabajo forzoso se ha reducido y representa el sueño que puede hacerse realidad para alrededor de 40.3 millones de personas, quienes hoy en día siguen sufriendo de la esclavitud, la mayoría de ellos niños y mujeres.No cabe duda de que para esta empresaria social su visita a Colombia tiene una misión muy importante al reunir al sector privado para ayudar en la lucha contra la trata de niños y el trabajo forzoso en las cadenas de suministro, reunirse con los niveles superiores del Gobierno para conocer su plan de acción nacional para combatir la trata de personas, potencialmente invertir en el país y ayudar a los campesinos de las fincas cafeteras, además de incentivar a la comunidad académica a la acción.¿Qué significa llevar el Sello de la Libertad de Rani Hong?Las compañías en el mundo que incluyan el Sello de la Libertad dentro de sus piezas visuales, podrán comunicar claramente a sus consumidores que están tomando activamente todos los pasos necesarios para prevenir el trabajo forzado y el tráfico humano dentro de sus cadenas de distribución. De esta manera, lograrán evitar cualquier tipo de riesgo o daño en su reputación corporativa.Más sobre Rani Hong:Pese a que esta mujer ha logrado significativos avances en el tema de derechos humanos y hoy es una de las voces que lidera en el mundo la lucha contra las diversas formas de esclavitud moderna; el principio de su historia no es nada fácil, lo que hoy la convierte en ejemplo de resiliencia.Cuando apenas tenía 7 años y vivía en la India, Rani fue separada de su madre y fue objeto de la venta ilegal de esclavos. Con 8 años, su condición emocional y física se encontraban en un estado deplorable y casi al borde de la muerte. Cuando no representó ningún valor para su dueño, quien la tenía esclavizada, fue vendida ilegalmente para ser adoptada. Rani fue acogida por una familia del estado de Washington en Estados Unidos, en donde encontró no solo una cura para su cuerpo, sino también experimentó la sensación de la libertad humana. Finalmente, en 1999 se reencontró con su madre y dio inicio a sus labores como defensora de la infancia ante el tráfico de personas.Ahora, varios años después, Rani tiene la Fundación Tronie, una organización sin ánimo de lucro que está enfocada en generar conciencia alrededor de la esclavitud infantil; ha asesorado a muchos gobiernos y ha estado en la primera línea de los esfuerzos internacionales por proteger a las mujeres y a las niñas, ha tenido intervenciones públicas ante la Asamblea General de la ONU y encuentros con varios presidentes y líderes del mundo, fue nombrada por la ONU como asesora especial de la Iniciativa Global de las Naciones Unidas para Combatir la Trata de Personas y ha hablado en el Vaticano acerca del impacto del tráfico humano sobre los esfuerzos de la sostenibilidad y ha inspirado a una nueva ola de corporaciones internacionales y líderes mundiales para luchar en contra de la esclavitud moderna.Por último, y no menos importante, Rani Hong es la creadora del Sello de la Libertad. Además, gracias a las publicaciones que ha liderado, ha motivado a una comunidad de más de 22,000 CEOs en 125 países, quienes han invertido más de 6 trillones de dólares en su propósito. Definitivamente, esta historia hace de Rani Hong una regia inspiradora.