El cantante de música urbana y líder social Big Poppa rompió el silencio sobre el asesinato de su padre, Luis Eduardo Prado, de 60 años, quien fue dado de baja el jueves 13 de marzo en Cali. En entrevista exclusiva con La Red, el artista reveló detalles de aquella noche trágica y expresó su dolor por no haber podido cumplir una última promesa.
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Según contó, la última comunicación que tuvo con su padre fue un audio en el que este, en un tono animado, le decía cuánto lo quería. Poco después, una vecina escuchó una detonación y vio a Luis Eduardo Prado y a su pareja, Aura, tendidos en la calle.
Ambos fueron trasladados al hospital más cercano, pero no lograron sobrevivir. Aura recibió más de ocho impactos de bala, mientras que su padre presentaba al menos dos. Big Poppa cree que, además de los disparos, su progenitor pudo haber sufrido un infarto, aunque aún espera el dictamen de Medicina Legal.
En cuanto al posible responsable, el cantante señaló que podría tratarse de un nieto de la señora Aura, con quien la pareja tenía diferencias. También lamentó que, pese a que la Alcaldía de Cali ofreció una recompensa por información sobre el crimen, hasta el momento no se ha entregado ningún dinero. Por ello, pidió a la gente que se informe bien antes de especular y aclaró que el asesinato de su padre no tuvo relación con retaliaciones en su contra.
Finalmente, Big Poppa confesó que, aunque sufre la pérdida, prefiere no llorar en público para no afectar a su esposa e hija. “Cada cual llora a sus muertos como quiere”, expresó. Además, recordó con tristeza que en su última llamada, su padre le había pedido un "pedacito de carne", algo que no alcanzó a llevarle antes de su muerte.
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