El portero del Real Madrid Iker Casillas está deseando tener a su primer hijo entre brazos , por lo que no ha dudado en compartir con sus seguidores de Instagram una tierna instantánea que refleja uno de los primeros regalos que ya han llegado para el bebé que espera su pareja Sara Carbonero, un gesto que revela la impaciencia con la que el futbolista afronta su estreno como padre.
"¡Esperando!", escribió el guardameta en el perfil de la popular red social con una fotografía de unos pequeños patucos azules y blancos.
Aunque Iker y la atractiva presentadora no son muy dados a publicar imágenes en la esfera virtual que hagan referencia a su vida privada, en esta ocasión el deportista ha hecho una excepción dando buena cuenta de la felicidad que siente en este momento -a tan solo un mes de que Sara dé a luz a su primogénito- lo que ha enternecido notablemente a sus seguidores.
"¡Qué bonito, Iker! ¡Precioso! Esta foto está llena de amor", comentó una admiradora en el muro de Instagram del portero, al que no dejaron de llegar mensajes similares como el de otra de sus fans: "Tengo ganas de verle ya la carita a ese mini Iker. Besos".
Además, una de sus admiradoras no ha podido evitar verse identificada con la emotiva imagen al estar esperando también el nacimiento de su primer hijo, al que llamará Iker y que nacerá casi a la par con el de la famosa pareja. "¡Me encanta, Iker! Mi hijo también nacerá en diciembre y le llamaré como tú. Ya falta poco para que Sara y yo demos a luz. Mucha suerte y espero que Sara tenga un parto rápido y bueno. Un beso", le dirigió esta internauta.
Además de compartir con sus seguidores el dulce momento en el que se encuentra por la llegada de su primer hijo, el arquero también ha destacado la excelente etapa personal en la que se encuentra inmerso desde que iniciara su romance con la reportera antes del Mundial de Sudáfrica 2010 y por el que le llovieron numerosas críticas durante el citado torneo futbolístico.
"Durante el Mundial ninguno de los dos quisimos darle importancia a las tonterías que se dijeron sobre nosotros. No comprendíamos por qué se decían esas cosas, pero forma parte del amarillismo. Lo pasó peor la gente que estaba a nuestro lado que nosotros mismos. Ahora espero un hijo con Sara y ella ha logrado darme tranquilidad y responsabilidad. De los 26 años a los 31 cambias más que de los 20 a los 25, y yo he crecido a su lado", confesaba Iker en una entrevista al diario El País.
Por: Bang Showbiz
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