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El pasado 3 de abril uno de los miembros del equipo de Drake se encontró a una mujer de 24 años descansando en una de las habitaciones de la mansión del rapero, ataviada con una de las sudaderas del intérprete y haciendo gala de una actitud completamente relajada y calmada. Aunque en un principio el incidente podría enmarcarse entre los muchos casos de allanamiento de morada que se producen cada año en las casas de las celebridades, lo curioso de este caso es que, una vez que la policía se presentó en la vivienda para interrogar y arrestar a la intrusa, esta confesó haberse hecho con un 'botín' que consistía en varias latas de Pepsi y Sprite y una botella de agua de la marca Fiji.
Finalmente la joven, que sostuvo en todo momento que tenía permiso del cantante para alojarse en su hogar, fue detenida y acusada de un delito de allanamiento y robo.
Por el momento se desconoce cómo consiguió entrar en la mansión o cuánto tiempo llevaba en el interior, ya que no existían señales de que alguna de las puertas o ventanas hubiesen sido forzadas.
Por su parte, Drake no se encontraba en la casa en el momento de los hechos. El rapero ha pasado el fin de semana en California para realizar una aparición sorpresa el sábado durante el concierto de su amigo Future en el festival musical de Coachella. Sin embargo, la velada se torció rápidamente cuando el artista acudió a un club de campo en La Quinta en el que recibió supuestamente un trato degradante y discriminatorio por parte del personal, una situación que no dudó en denunciar en una publicación -ya eliminada- de sus redes sociales. Por su parte, los responsables del establecimiento ya le han ofrecido públicamente sus disculpas y se han comprometido a investigar lo sucedido.
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Por: Bang Showbiz
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