Por mucho que intentemos odiarla repitiéndonos que no es ni tan alta ni tan guapa, en el fondo Kate Moss sigue gustándonos más que a ella misma una buena noche de juerga. Porque, quién más podría ponerse un vestido de leopardo rojo de sospechoso origen chinesco y hacer que parezca la prenda más estilosa del mundo.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:38 p. m.