Laura Acuña tuvo una clase de champeta en La Voz Kids, ¿aprendió bien?

Definitivamente los participantes deLa Voz Kids no paran de sorprender en el Diamante, tanto con sus talentos como con su personalidad, la cual no solo cautiva a los entrenadores y al público, sino que también crea una conexión especial con los colombianos que noche a noche se conectan con ellos.

Además, sus historias de vida también son un plus bastante importante, ya que permiten que las personas conozcan el origen de sus pasiones, sus sueños y el camino que han tenido que recorrer, tanto ellos como sus familias, para llegar hasta allí. Siendo un reflejo de que esto es algo por lo que han estado trabajando, pues no es una tarea fácil.
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Es por ello que, Laura Acuña no quiso desaprovechar la oportunidad de conocer un poco más sobre Mateo, un niño de 10 años que sorprendió con su alegría a pesar de las adversidades que ha vivido.

El pequeño llegó en patines al Cubo Amarillo en donde nuestra presentadora lo estaba esperando en compañía de sus padres, por lo que a su llegada ella no pudo evitar confesar que tenía algo en común con él, ya que también practicaba este deporte.

Por otra parte, este niño contó cómo ha sido su relación con la música, pues incursionó en ella desde chiquito cuando le pedía a sus hermanos que cantaran y tocaran instrumentos con él, por lo que cuando detallaron su talento decidieron inscribirlo en una escuela en donde potencializaron su voz. Frente a esto, su madre le reveló a Laura que ella no para de llorar cada una de las veces que lo ha escuchado cantar, pues aseguró que él no solo tiene un gran talento, sino que le tocó las fibras.

Con respecto a su padre, comentaron que tristemente él no pudo estar en los momentos familiares más especiales, por lo que el hombre afirmó, en medio de lágrimas, que nuca pudo estar en los cumpleaños de su hijo, ni en aquellos eventos en los que él lo necesitaba. Aunque el pequeño aseguró que eso había sido algo doloroso, ahora quieren recuperar el tiempo y por ello uno de sus planes favoritos se convirtió en bailar.
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Al saber esto, la también modelo, preguntó sobre aquello el ritmo que más disfrutaban, por lo que sin dudarlo le respondieron que era la champeta, un género muy sonado en la costa colombiana.

Fue todo este acercamiento el causante de que nuestra presentadora se animara a aprender un poco de champeta, con Mateo y su padre como sus profesores. Con los tacones a un lado y todo el entusiasmo, Laura conoció el 'paso del cangrejo' y el 'paso de la serpiente atacando'.

En medio de risas, los tres demostraron todo su talento en la pista de baile, por lo que ella no dudó en comentar que a pesar de que lo estaba haciendo lo hacía de una forma chistosa, sin que esto haya sido un impedimento para que lo siguiera haciendo. Finalmente, y un poco agotada, ella envió a Mateo al Diamante para que se presentara ante los entrenadores.