Luego de su impresionante accidente, Kaleth despierta en el hospital confundido por todo lo que está pasando. No entiende por qué nadie se da cuenta que él sigue estando presente y luego entiende que permanece en el limbo.
Allí descubre que su misión en el mundo era darle una lección a Miguel para que aprendiera, pero fueron ambos los que recibieron la enseñanza.