Rubí ha logrado convertirse en una de las producciones que acompaña a los colombianos en las tardes, pues su envolvente historia ha dejado a más de uno sorprendido. Además, su trama ha sido reconocida internacionalmente desde el año de su lanzamiento, por lo cual hay un momento imborrable para los fanáticos de la novela.
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Perro se ahoga en escena de Rubí
Este cómico momento, tomado de uno de los capítulos de Rubí, es un punto muy importante de la novela, pues la protagonista le confiesa a Loreto, su mejor amigo, un secreto bastante delicado y que podría cambiar su estilo de vida, lo que implicó que estos diálogos y el comportamiento de los actores fuese una fusión de emotividad y seriedad.
Cabe destacar que este hombre es el fiel confidente de la joven Pérez, por lo tanto sabe sus verdaderas intenciones y conoce el interés que tiene tanto con su esposo como con su gran amor: Alejandro, por lo cual la apoya en sus locas ideas.
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A pesar de la carga emocional de esta escena, la cual estaba llena de una dualidad de sentimientos, nadie en el set se dio cuenta de lo que estaba pasando con uno de los personajes que hacía parte de este montaje: el perro de Loreto.
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Y es que el personaje que interpretaba Miguel Pizarro siempre tenía cargado a este animal, sin embargo, en esta grabación ni la producción ni los actores notaron que el peludito estaba ahogándose y que esto quedó captado en las cámaras, en un plano bastante cercano, el cual hace pensar que estaba intentando escupir una pelota.
De qué trata Rubí
Esta es una producción que cuenta la historia de vida de una bella joven universitaria que vive junto a su madre Refugio y su hermana Cristina en una humilde vecindad. Pertenecen a una familia sencilla y ella no deja de lamentarse por la situación económica que les ha tocado vivir desde de la muerte de su padre. Debido a esto, se obsesiona con el dinero y decide utilizar su belleza física como arma para atraer a un hombre guapo y rico que la haga su esposa y a la vez dueña de fortuna y prestigio.
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Rubí estudia en una universidad privada gracias a una media beca y al apoyo de su hermana Cristina, quien trabaja muy duro para ayudar a su madre a sostener el hogar. Allí, ella se hace amiga de Maribel, una joven millonaria, dulce y sencilla, a quien un accidente en su niñez la dejó discapacitada de una pierna. Maribel piensa que en Rubí ha encontrado, más que una amiga, una hermana, y la quiere sinceramente, sin saber que el afecto de su amiga está envenenado por la envidia, los celos y la ambición.
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Maribel, una joven tímida e insegura a causa de su defecto físico, pasa horas en su computadora conversando por Internet con un joven llamado Héctor Ferrer, un millonario y guapo arquitecto con quien, tiempo después se hacen novios sin haberse visto personalmente, él la ama con sinceridad y decide conocerla en persona. Rubí siente curiosidad por Héctor y coquetamente lo recibe sin saber que este trae a su mejor amigo, el recién titulado Ortopedista, Alejandro Cárdenas.
Rápidamente la protagonista se siente atraída por Alejandro y se enamoran perdidamente. Al parecer a Rubí la vida le sonríe, tiene un novio guapo, joven y rico, pero realmente es una falsa idea que se ha hecho, ya que este pertenece a una familia de clase media que, con mucho esfuerzo, terminó sus estudios. Rubí tendrá que elegir entre casarse con el hombre que ama o seguir fiel a su juramento.