El capítulo 28 de Yo Me Llamo está lleno de sorpresas y emociones, especialmente porque la doble de Paquita la del Barrio sube al escenario del Templo de la Imitación para interpretar la icónica canción 'Piérdeme el respeto'.
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Al terminar su presentación, la cantante no deja pasar la oportunidad de dirigirse a César Escola con una solicitud poco común: le pide que le perdiera el respeto. Con su característico tono directo y un toque de humor, Paquita deja claro que su relación iba mucho más allá de la que concierne a la de participante- jurado.
En medio de la evaluación, Paquita también aprovecha para lanzar un mensaje poderoso: las mujeres deben tener iniciativa. Con una mirada decidida, comparte su postura sobre la importancia de que las mujeres se hagan escuchar y tomen acción en todos los ámbitos de la vida.
Pero lo más inesperado llega cuando César Escola, además de ofrecerle consejos técnicos, decide bajarse de la mesa de los jurados. Con una sonrisa cómplice, se acerca a Paquita y, en un gesto de agradecimiento por su dedicatoria, le da un beso en la mano, demostrando su admiración y respeto hacia ella.
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César, además, le da un consejo vocal, recordándole que debe poner más atención a los finales de las vocales en sus interpretaciones. Le explica que algunas de estas no son tan abiertas como las está realizando, sino cerradas, lo que podría afectar la proyección de su voz.
El ambiente en el escenario se llena de complicidad, risas y una lección sobre el canto, pero también sobre el respeto y la relación entre experto y la concursante.
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